martes, 25 de julio de 2017

Los celos entre hermanos


Cuando tenemos nuestro primer hijo descubrimos todo el amor que podemos sentir a una personita que muy rápido se convierte en nuestra favorita en el universo, todo ese sentimiento tan especial que parece que nuestro corazón va a explotar, es demasiado lindo para ser verdad, pero ¿qué pasa cuando te enteras que vas a tener otro bebé? El tan esperado "hermanito", y dentro de toda la felicidad, mi primer temor fue y ¿ahora cómo podré amar a dos personas de igual manera?, ¿se puede? Y la respuesta la fui descubriendo en el transcurso de los años.


Cuándo Haru vió por primera vez a Benja, justo pasó cuando le estaba dando la teta en la clínica, y la verdad no sabía que hacer, ella tenía 1 año y 11 meses y aún no se destetaba del todo, no sabía como iba a reaccionar pues no quería que piense que alguien había venido a robarle a su mamá, a su teta (ya le habíamos hablado bastante antes) así que la saludé, le dije él es tu hermanito, y le ofrecí la otra teta, ella feliz con su inocencia tomó un poco. Fue la primera vez que lactaban en tándem, fue un súper e inolvidable momento para mí. Por fortuna pudimos continuar la lactancia así, con los dos a la vez, ellos se miraban a los ojos y creo que se sentían en el mismo nivel o al menos eso es lo que yo esperaba, las siestas también eran juntos, los baños, casi todo como gemelitos cuando son hijos seguidos se les cría juntos, con la misma atención porque casi siempre hay que cubrir las mismas necesidades.





Haru pide cargar a Benjamin con unos días de nacido





Siempre jugando y haciendo de las suyas juntos.





Haru siempre ha sido especial, y un poco madura para su edad, y creo que lo tomó bien, con ella no existieron los berrinches durante el embarazo, ella siempre muy emocionada y con las ganas de ayudar así tan chiquita lo demostraba. Siempre le conversaba sobre que tenía que cuidarlo que era su segunda mamá y aún lo es, de sus dos hermanos.

Haru carga por primera vez a Mayu
Haru & Mayu durmiendo abrazadas.

Pero la historia continua, y con Mayu todo fue y es muy diferente, Benjamin mi único varón, ese hijo hombre que dicen que es pegado muy pegado a mamá, y no es para nada machismo, es una realidad, la relación es muy especial entre él y yo, no es mi favorito es simplemente cuestión de carácter (creo que las mujeres somos más independientes desde temprana edad), él ya estaba dejando los berrinches, esos de los terribles dos, pero cuando estaba esperando a Mayu se intensificaron y tuve que tener más paciencia...

Estuvo  destetándose pero volvió con más tomas, pataletas fuertes, muchas, lo cargaba con barriga, fue súper difícil, yo con mis emociones a flor de piel, lloraba de la desesperación de no poder demostrarle que el amor que sentía por él, no iba a ser el mismo que iba a tener por su hermana. Sí porque son amores diferentes, aunque se diga que a todos los hijos se les quiere igual, yo puedo afirmar que no, no se les quiere igual, porque ellos no son iguales, cada uno de nuestros hijos son diferentes y únicos, y a cada uno se les quiere con sus defectos y virtudes, por lo que son! Esta es la gran respuesta que obtuve solamente con el pasar de los años, algo que no lo tenía claro pero solamente con el día a día lo pude descubrir.

Benjamin cuida y cariña a Mayu
Haru ahora grande se ha unido a los celos, un ejemplo es que pelean porque le sirvo primero a uno y al otro luego, pero es comprensible, a veces mamá tiene que partirse en tres y hay días que no lo logra, pero he aprendido a decir en voz alta, los sentimientos que tal vez ellos aún no puedan expresar en palabras, y les digo que no es que quiera más al que le sirvo primero, es que simplemente a veces le tocará a uno así y otras veces al otro, pero que yo los amo a los tres porque son mis hijos, los tres han salido de la barriga de mamá! (Y pienso repetírselos hasta que su corazón lo entienda). Varias escenas merecen esas explicaciones, y bueno Benja con sus casi 5 años me sigue viendo cuando le doy teta a Mayu, y a pesar que logré darles en tándem también a ellos dos, se me pega y nos abraza, a veces aún toma un poquito, y ¿por qué no? si la teta también sirve para consolar, para sentir cerca a mamá.

Benjamin nos abraza mientras Mayu toma la teta
Los tres hermanos, mis chinis adoradados.
Ellos se adoran, son cómplices, se ayudan, se unen para hacer miles de travesuras, pero estos episodios de celos siempre existirán entre hermanos, pero es inevitable, porque son humanos, creo que si viera a mi esposo con otra mujer en brazos, no sólo haría berrinche sino algo más ja! Algo así es la situación y aunque no los comparemos, ni los hagamos competir, tengan por seguro que igual habrá celos, porque a veces las mamás nos solemos preocupar por el que necesita más ayuda o el más "indefenso", eso no significa que tengamos favoritos, porque ya sabemos que el amor de mamá alcanza para todos.


Mamá ama a los tres, cada quien por como es!







Melissa Praeli
Mamá 2x2





















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